La sal es esencial para la vida. No podemos vivir sin ella.
Para que nuestro organismo funcione correctamente debemos elegir una sal completa que contenga todos sus elementos naturales.
La sal cristalina tiene una edad de 250 millones de años.
Esta sal de más de 250 millones de años proviene de las montañas del Himalaya.
Sin duda es la sal más pura disponible en la tierra, al no estar contaminada con ninguna toxina o contaminante.
A la sal del Himalaya se la conoce como “oro blanco” porque contiene eones de luz almacenados en ella.
Junto con el agua pura de manantial, los cristales de sal del Himalaya ofrecen todos los elementos naturales que encontramos en el cuerpo humano; los mismos elementos que originalmente se encontraron en el “mar primitivo”.
Al contener los 84 elementos que se encuentran en nuestro cuerpo, los beneficios de los cristales naturales de sal del Himalaya incluyen:
- Regular el contenido de agua del cuerpo.
- Equilibrar el exceso de acidez de las células, particularmente las células del cerebro.
- Absorción de partículas de alimento en el tracto intestinal.
- Ayudar a limpiar las obstrucciones de moco y flemas en los pulmones, sobre todo en pacientes que sufren de asma o fibrosis quística.
- Actúa como un potente antihistamínico natural que ayuda a limpiar la congestión nasal.
- Previene calambres musculares.
- Reafirma la estructura del esqueleto – puede aparecer osteoporosis cuando el cuerpo necesita más sal y la extrae de los huesos.
- Regular el sueño, al ser un hipnótico natural.
- Mantener la libido.
- Prevenir la aparición de varices en las piernas.
- Estabilizar los latidos irregulares del corazón – junto con el agua es esencial para regular la presión sanguínea.
- Equilibrar los niveles de azúcar en sangre y ayudar a reducir la tasa de envejecimiento.
- Contribuir a la generación de energía hidroeléctrica en las células del cuerpo.
La sal convencional de cocina que se vende en los supermercados ha sido “químicamente depurada”.
Lo que permanece después de la depuración de la sal convencional es solamente cloruro sódico. El cloruro sódico es un elemento químico artificial que el organismo rechaza por ser una sustancia desconocida para él, o sea que no es reconocido como un nutriente.
Esta forma de sal está presente en casi toda la comida procesada. Cuando añadimos más sal a alimentos que de por sí ya la contienen, estamos ingiriendo más sal de la que nuestro cuerpo puede procesar. Esto es muy importante ya que la mayoría de la gente consume comida procesada.
Los cristales de sal de la sal convencional están aislados unos de otros. Como nutriente, la sal convencional no tiene ningún valor.
La póliza de salud que te ofrece la naturaleza: sal pura de cristales del Himalaya.
La sal de mesa y de cocina convencionales carece de las trazas de minerales que hacen de los cristales de sal del Himalaya un elemento tan preciado.
Los cristales de sal han estado más de 250 millones de años soportando presiones tectónicas extremas, lejos de toda exposición a cualquier tipo de impurezas.
La estructura única de esta sal también almacena energía vibracional primaria.
Todos los minerales y elementos traza de los cristales de sal están disponibles en forma coloidal -lo que significa que son tan pequeños que las células pueden absorberlos fácilmente.
Los cristales de sal del Himalaya no sobrecargan tu cuerpo como lo hacen otras sales. Es muy difícil que tu cuerpo absorba demasiados cristales de sal, ya que el organismo dispone de efectivos procesos que regulan este proceso.
Los cristales de sal natural también tienen un efecto equilibrador y no contribuyen a aumentar la tensión arterial como la sal de mesa convencional.
Los elementos de los cristales de sal forman un compuesto en el que cada molécula está interrelacionada. Dicha conexión permite que los componentes vibracionales de los 84 elementos traza presentes en la sal estén en armonía unos con otros, contribuyendo por tanto al efecto equilibrador de la sal.
Cuando hablamos del poder holístico de la sal natural, nada se puede comparar con los cristales de sal del Himalaya por las siguientes razones:
- Es el grado más puro de sal natural.
- Si se observa bajo un microscopio de electrones, los cristales de sal poseen una perfecta estructura cristalina.
- Se extrae a mano de las minas y se lava a mano.
- Los cristales de sal son inmunes a las radiaciones electromagnéticas.
- Los cristales de sal no contienen contaminantes medioambientales.
- No tiene fecha de caducidad, ni precisa de absorbentes de humedad para que no se apelmace.
Minerales clave contenidos en la sal cristalina del Himalaya restauran el equilibrio del organismo.
Los cristales de sal del Himalaya es sal en su forma nativa, que conserva toda su energía vibracional intacta, lo que ayuda a devolver al cuerpo a su estado de equilibrio.
La carencia de suficientes electrolitos trastoca la homeostasis del organismo -el equilibrio de substancias químicas que favorece las funciones del organismo.
El prestigioso Instituto Frezenius en Europa analizó los cristales de sal del Himalaya, y comprobó que además de los numerosos minerales traza contiene potasio, calcio y magnesio que ayudan al cuerpo a alcanzar el equilibrio restaurando fluidos, así como a recargar las reservas de electrolitos cuando se suda mucho.
La sal del Himalaya tiene una estructura cristalina equilibrada. Sus 84 minerales se encuentran interconectados en una estructura harmoniosa. Lo que significa que la energía contenida bajo la forma de los minerales puede ser fácilmente metabolizada por el cuerpo.
Esta sal tiene un efecto energético vitalizante.
La ganancia neta del cuerpo es grande con 0 pérdidas de energía.
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